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1.9.08

Manchester, 3 cojones.

Dos horas siete minutos. EleÁ serpentea por la cama enredando lo que fueran en principio edredón, sabana o almohada; Puta Farola no le deja dormir, esta noche está traviesa y atraviesa la pánfila cortina como la manteca de nevera rompe el Bimbo© blanco blando sin tostar.

Mas o menos.

Pih- Pí! Pih-Pí! Es un pájaro? Me estoy meando? NO, es un mensaje –quien coño será- EleÁ hace sus apuestas esquizoides, las neuronas de la derecha aciertan, las de la izquierda pierden y se van a dormir.

Es ACé que quiere que vaya a Manchester en ese mismo momento... ¿Avión, canoa, globo, trineo o skate? EleÁ está indecisa, pero no hay tiempo para nimiedades sibaritas, el sms reza con claridad que es muy importante que acuda enseguida porque están allí la mar de entusiasmados bebiendo birras y cotorreando sobre literatura, metafísica y sueños rotos. Pinta espléndido el plan, y aunque no sé qué implica el plural del verbo “estar” que ha elegido en este caso, me importa 3 cojones, lo cierto es que me encantaría poder obedecer y desaparecer en Manchester con usted y beber y distraer- me/te y abstraer lo que puedo creer, y obtener el placer de poder entender por qué. Por qué?

Por qué no estoy allí?

15.7.08

Hortera

He recibido este juego hortera de un ser hortera, tan hortera que pretendía tenderme una trampa a plena luz del día para que le enlazara en el blog, pero no pienso saltarme el trato (me oyes, hortera!?)

Estas son las reglas, pero obedeciendo a mi naturaleza incorregiblemente delictiva voy a pasarme por los cojones la norma 2.

1- Escribir seis cosas sin importancia que nos hagan felices.
2- Poner el enlace de la persona que nos ha elegido.
3- Poner las reglas en el blog.
4- Elegir seis personas para continuar el desafío.
5- Avisar a esas personas y dejar un comentario en sus blogs.

Cosas sin importancia que me hacen feliz? se me hace incoherente teniendo en cuenta que cualquier gilipoyez que me haga feliz es importante por ese mismo hecho, pero en fin...:

1- Decir la palabrota adecuada en el momento adecuado.

2- Comer cerezas rojas rojísimas que me regala el frutero de debajo de mi casa.

3- Encontrarme un amigo inesperadamente cuando transeunto el barrio.

4- Pincharle Internet al vecino y tener ADLS gratis.

5- Ver dormir, jugar, comer, ladrar, correr, morder, mear, etc a mi perra.

6- Que llueva tremendamente en verano durante un día entero y se limpie el aire.

7- Decirle a Vanity cuán hortera se pone a veces y lo mal que me cae a mi también.

8- Tener un blog donde poder hacer que otros dementes lean libremente las cosas que me da la gana de escribir.

9- Reparar los muebles chachis que me encuentro en la calle los jueves por la noche.

10- Pensar en aplastarle la cabeza al eterno turista que coloniza las calles del centro y las llena de ruido y basura, y obstruye el paso con su orondo cuerpo rosáceo... Aunque al final nunca hago porque pienso que revierte mas complicaciones para mi bienestar que si decido simplemente ir por donde no están Ellos. Pero simplemente pensarlo e imaginarlo me hace feliz.

11- Poder saltarme las normas de los juegos horteras que Vanity, el Gran Hortera, me propone.

Pringan: Pau, Jen, Velocet, La Chica Triste, mi Prima Lucía y el Frutero de Abajo.

12.7.08

EmeGé & la Santa Madonna

Ayer bebí cerveza con mi amigo EmeGé.

Teníamos muchas cosas que contarnos después de 4 días separados viviendo intensamente nuestras propias vidas. Siempre vamos a una pizzería cuyo camarero nos guiña el ojo y nos invita a chupitos de orujo de hiervas tras la cena, presumiblemente con la intención de ligarnos, pero aun no hemos sido capaces de intuir si está interesado en mi amigo EmeGé o en mi... lo cual tampoco nos importa demasiado mientras siga ofreciéndonos orujo sin ánimo de lucro (económico).

Esta semana había sido muy intensa para mi, con nuevas e inesperadas conquistas imposibles, cuya consumación se vería relegada a una dimensión paralela inalcanzable que no había que tener la intención de perseguir. Mejor asi, me repetía, y acabé creyéndolo, como siempre... Por su parte, EmeGé traía la misma noticia de todas las semanas, pero con nuevos nombres para los mismos personajes; EmeGé siempre se medio enamoraba a medio plazo de medio adolescentes medio preciosas que medio idolatraba y medio conseguía que le medio rechazaran no sin antes medio flirtear con su medio roto supercorazón. Según yo, su problema era que trataba a las chicas de una forma excesiva e innecesariamente divinizante; para él las mujeres no existían, en su lugar el mundo estaba plagado de diosas intocables que no merecían la tortura de ser siquiera cortejadas por un ser de su calaña...

EmeGé tenía una amante con contrato indefinido y alguna que otra esporádica a las que besuqueaba con desgana mientras se convencía de que podía hacerlo porque solo eran semidiosas y no le atraían demasiado, sin embargo su olimpo siempre estaba abastecido de musas divinas que jamás trataría de alcanzar y cuyo trato se reducía a un babeo constante y la cotidiana sarta de ofrendas intelectuales que pudiera untar sobre sus respectivos egos cada vez que tenia el gran placer de obnubilarse con sus presencias...

Lo que EmeGé no sabía, aun, es que la mayoría de las mujeres no nos enamoramos de los hombres en sí, sino la actitud que representan, y a juzgar por el perfil de su imaginario teológico, la mayoría de sus divinidades le habrían cantado a coro gustosamente este tema, con el fin de instruir a mi amigo EmeGé en el mundo de la seducción y el cortejo masculino...

Va por ti EmeGé, escúchala atentamente todas las veces que necesites hasta que salgas de tu cuarto en pelotas dispuesto a arrasar esta apestosa ciudad!

Fais Moi Mal Johny Johny Johny!



19.4.08

El Romanticismo es una lacra*

Yo no era tu novia, era tu mujer, y no era solo tu mujer, era tu mejor amiga, y tu no eras mi único amante, pero si el único al que amaba.

Me hace daño haber tenido razón, ahora que ya no os queréis tanto, pero me duele menos que no haberla tenido.

Somos todos unos yonkis, hoy por ti y mañana también.

Manuscrito hayado en un rincón de la acera impar de la calle Sicilia.

*