11.12.08

del lecho al hecho


esta mañana

al saltar la alarma

del despertador

antes que el filo del sol

me he tapado la cabeza

con el edredón de plumas de pollo

y luego me he tapado la nariz

con dos deditos

y luego he marcado

ese número

y les he dicho

que estaba muriéndome

de pulmonía

de sinusitis y de migraña

y que sufría un doloroso esguince

cardiovascular en el alma

y que

MUY A MI PESAR

no iba a poder ir a

ganarme la vida

allí con ellos.

luego he soltado mi nariz

y he sacado la cabeza de entre las plumas

y he sonreído antes de quedarme

dulcemente dormida

durante horas

y horas y horas

con la misma diligencia y probidad

que un feto

acurrucado en su lecho

sangriento.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Hacer novillos al deber...
Buenaventura pues!

Yo sólo tengo resacas ramplonas y asfixias freudianas. Hoy cenaré en un restaurante lleno de padres presenciales, a ver si alguno me ayuda a vomitar el bezoar de la mala conciencia.

Cuídate de los esguinces metafísicos, que no se curan ni con Reflex.

Versos

Isra dijo...

haría eso cada mañana...
sin compararme con un feto en un lecho sangriento... ;)

Julia dijo...

Hacer novillos, y ovillos y más cosas que caben bajo las faldas de la Srta. Sucumbida

Xisco dijo...

Me darías envidia si no me hubiera pegado una siesta de 3 horas y media esta tarde en el sofá con mi nuevo edredón de plumas de avestruz y su funda con tonos anaranjados.

A ver quién me duerme esta noche.

x)

Dara dijo...

Pero sabían que mentía.



Miau

Brick de garbanzos dijo...

Te veo de aquí un tiempo solicitando una baja con la misma diligencia y probidad que un tuberculoso del siglo pasado.

Qué lejos queda el teatro de los telones de verdad :P

Julia dijo...

*_• ----vaya, puesss... no lo descarto.

Roberto Tega dijo...

Todos los días la misma tentación